Estuvimos en la Noche de las Peatonales conversando con Federico Lande, psicólogo especializado en ciberpsicología, sobre los videojuegos y más precisamente los deportes electrónicos.
Entendemos por deportes electrónicos aquellos juegos online que permiten a los jugadores enfrentarse entre ellos, que tienen un reglamento y donde se compite en ligas o torneos organizados con posibilidad de ganar premios. “Quizás el mayor cuestionamiento lo encontramos en relación al gasto de energía”, destacó Federico. Pero esto lleva a vincularlo a deportes aceptados hace tiempo como tales, como son el ajedrez o el tiro al blanco.
En relación al acompañamiento que requieren los deportistas de esports, Federico Lande remarcó que en el entrenamiento se trabaja intensamente la atención, la concentración, la comunicación, los liderazgos; así como el manejo del estrés y de la ansiedad. Incluso en su experiencia, compartió el trabajo con kinesiólogos, traumatólogos y nutricionistas. Esto evidencia que el desempeño tiene que ver con el entrenamiento para mejorar los rendimientos.
Además, conversamos con Federico sobre los videojuegos, el tiempo que dedican los jóvenes y los comportamientos a los que hay que prestar atención. En torno a este tema, destaca que la OMS decretó la existencia de la adicción a los videojuegos, es decir, que se trata de actividad que en algunos casos puntuales puede derivar en una patología. Reconoce que muchas veces recibe consultas de docentes y padres que sienten que la situación se les va de las manos.
Para identificar cuáles son los límites a los que estar alerta, el profesional recomienda prestar atención al tiempo que la persona pasa jugando, que no sea perjudicial para el desarrollo normal de sus actividades; que al momento de tener que frenar el juego, no haya una reacción violenta desmedida; cuando se pierde el interés por la sociabilidad y los encuentros analógicos; estar atentos a la alimentación y el movimiento de quien juega.
Esto nos llevó a consultar sobre el diseño actual de los videojuegos y el atractivo visual e inmersivo que generan. Es así que Federico explicó que hay una búsqueda de generar placer en el jugador, proponiendo desafíos que se van superando, pero que eso no es directamente adictivo. De hecho destaca: “Puede ser que el videojuego toque algo de la personalidad que despierta esa reacción en la persona, pero los videojuegos no son adictivos en sí mismos”. Por esto es importante acompañar a los jóvenes en el uso de los videojuegos, una crianza digital supervisada por los adultos.
